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Dr. David Weeter

El diamante

mayo, 2020 No hay comentarios
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El diamante
La Voz de Victoria del Creyente mayo, 2020
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En una noche especial de marzo, declaré sobre mi hijo Ryan y su novia, un breve mensaje que Dios me había ordenado que les compartiera. Pensé que el mensaje que el Señor me había dado era específicamente para la recepción de la boda, pero no sabía cómo Dios iba a desarrollarlo y usarlo. Mientras sostenía la mano de mi esposa esa noche, sintiendo el anillo de diamantes en su dedo, supe que Dios nos había estado preparando, a través de décadas de nuestro propio matrimonio, para impartir algo especial a nuestro hijo y su novia Tessa, su diamante.

Los diamantes son hermosos y fuertes. Son muy buscados y cada vez más valiosos.

Para el mundo, los diamantes casi podrían convertirse en un cliché cuando se trata del matrimonio. Pero Dios nunca es un cliché. Él creó diamantes como maravillosos ejemplos de belleza extrema combinada con fuerza extrema.

Hasta el día de hoy, los diamantes son las gemas más valiosas y preciosas de todas las piedras preciosas. ¿Y qué dice la Biblia sobre las gemas? Proverbios 31:10 dice: “¿Quién puede encontrar una mujer virtuosa? porque su precio está muy por encima de los rubíes”. El valor de un diamante, su preciosidad y su rareza, está muy por encima de los rubíes. La Biblia Amplificada, Edición Clásica, lo dice de esta manera: «Una mujer capaz, inteligente y virtuosa, ¿quién es aquel que puede encontrarla? Ella es mucho más preciosa que las joyas y su valor está muy por encima de los rubíes o las perlas». Esta mujer virtuosa es el diamante en tu hogar de fe.

La gema maestra del hogar

Si el valor de un diamante está muy por encima del valor de todas las otras gemas, podemos inferir que el diamante está sobre todas las otras gemas. Isaías 54:11-12: «Pondré tus piedras en colores claros [en antimonio para mejorar su brillo] y asentaré tus cimientos con zafiros. Y haré tus ventanas y pináculos de ágatas o rubíes [brillantes], y tus puertas de carbuncos [brillantes], y todas tus paredes [de tus recintos] de piedras preciosas.» (AMPC).

Cuando dice cimientos, ventanas, puertas y paredes, ¡está literalmente hablando de tu hogar y tu familia! Estas gemas en tu hogar son la fundación sobre la que la gema maestra reposará, tu diamante. Estas son las gemas que el Señor le proporciona a tu diamante para construir un hogar. Tu hogar y tu familia están diseñados, construidos y equipados con cada una de estas gemas, y el diamante se encuentra en la parte superior.

De hecho, al comienzo del versículo, el Señor habla sobre “el engaste” de las joyas. Ese encaste tiene dos propósitos principales. Primero, se hace para mejorar el brillo de la piedra. Un diamante de alta calidad tiene muchas facetas; Por lo tanto, el engaste es importante para mejorar la apariencia del diamante. Las muchas facetas afectan el reflejo y la refracción de la luz; El color y la pureza de la configuración afectan el color y la apariencia del diamante mismo.

El versículo 11 dice que agregará valor a las piedras para “mejorar su brillo”. Esto se refiere a cómo las mujeres egipcias usarían antimonio en polvo como maquillaje que, cuando se aplicaba alrededor de los ojos, hacía que la apariencia de sus ojos se destacara.

El segundo propósito del engaste de una joya es un propósito funcional. Particularmente al elegir una configuración adecuada para una gema valiosa, como un diamante, es vital seleccionar una configuración que mantenga la piedra segura en su ubicación. Si la configuración está dañada o debilitada, corres el riesgo de perder algo muy valioso. Observa lo que dice la escritura que sucederá cuando el diamante esté en su posición correcta:

«Y todos tus hijos serán discípulos [enseñados por el Señor y obedientes a Su voluntad], y grande será la paz y la compostura imperturbable de tus hijos. Te establecerás en la justicia (rectitud, de conformidad con la voluntad y el orden de Dios): estarás lejos incluso del pensamiento de la opresión o la destrucción, porque no temerás, y del terror, porque no se acercará a ti.» (versículos 13-14).

El versículo 13 comienza con la conjunción “Y”. Una conjunción toma lo que viene antes y lo conecta con lo que sigue. Cuando las piedras y gemas están en su lugar, cuando el diamante se coloca de manera brillante y segura, cuando los cimientos, ventanas, puertas, muros y bordes se colocan con sus piedras preciosas, entonces todos sus hijos serán enseñados por el Señor y serán obedientes a Su voluntad. Entonces grande será la paz y la compostura imperturbable de tus hijos. Debido a que te estableces en la justicia, estarás lejos del pensamiento de la opresión o la destrucción, porque no temerás ni el terror se te acercará.

Entonces, ¿qué configuración o engaste mejorará el brillo del diamante y lo mantendrá seguro? En otras palabras, ¿cuál es el lugar apropiado en el hogar para la esposa? Esta pregunta se ha dividido incorrectamente de la Palabra de Dios durante siglos. Se nos dice que dividamos correctamente la Palabra (lee 2 Timoteo 2:15.), y este tema en particular ha sido dividido tan injustamente por la religión que ha causado un tremendo debilitamiento del hogar, la familia y, en consecuencia, de la protección, liberación y salvación de las personas que componen esos hogares.

Es cierto, debido al orden natural en el ámbito físico en esta tierra, que el esposo se coloca como la cabeza y la cobertura de su esposa; eso es lo que significa cabeza, “el líder, la cobertura, el protector” (lee Efesios 1:22, 5:23-29.) Sin embargo, como veremos, queda claro que la esposa es la cabeza del funcionamiento del hogar.

Todas las familias tienen un lado “empresarial” en ellas. Hay ciertas cosas que deben manejarse. Los horarios deben ejecutarse. Los niños necesitan ir al colegio, las prácticas y las citas. El mercado debe comprarse. Los artículos del hogar deben estar asegurados. Hay ciertas operaciones logísticas de cada hogar. Esencialmente, una familia es una institución de humanos que tiene que ser organizada.

A la gente le gusta pensar que una “familia amorosa” solo necesita que sus miembros se amen unos a otros y así, todo lo demás encajará. Eso puede ser parcialmente cierto. El amor es el poder que hace que todo funcione. Pero hay una multitud de problemas logísticos en una familia que deben abordarse. Esto significa que una esposa debe ser multifacética.

Piensa en el corte de un diamante. El corte del diamante es un estilo que se usa al moldear un diamante para pulirlo. Un ejemplo sería el muy codiciado “corte brillante”. El corte brillante es un corte de diamante en una forma con numerosas facetas para crear un brillo excepcional a través de la piedra preciosa. El corte multifacético proporciona el máximo retorno de la luz a través del diamante para que su brillo sea magnífico.

¿Captaste el significado de eso?

¡Los diamantes más deseables y valiosos, incluido el de tu hogar, son multifacéticos para proporcionar el máximo retorno de la luz!

A medida que continúes este estudio, ten en cuenta este principio del corte multifacético.

La mujer de Proverbios 31

Desafortunadamente, la gran mayoría del Cuerpo de Cristo no tiene idea de cuál es realmente la descripción de Dios de una esposa. Incluso leen Proverbios 31 todo el tiempo, y todavía no tienen idea. Hay muchos libros y mensajes sobre la mujer de Proverbios 31, pero a medida que nos sumergimos en el tema de una “mujer virtuosa”, te sorprenderá lo que realmente significa. La mayoría de estas enseñanzas son muy incompletas en el mejor de los casos y en el peor de los casos, descaradamente incorrectas.

Si le preguntas al miembro promedio de cualquier iglesia cuáles son las características de una mujer virtuosa, la mayoría de las veces escucharás palabras como “casta, tímida, callada, mansa, piadosa, buena, de voz suave”. Pero ¿qué significa realmente ser virtuosa? En hebreo, que es el idioma utilizado para escribir el libro de Proverbios, virtuosa significa: “una fuerza, ya sea de hombres, medios u otros recursos; un ejército, rica, virtud, valor, fuerza, poder, actividad, ejército, una banda de soldados o una compañía; grandes fuerzas, bienes, anfitriones, poder, poder, riquezas, poder, fuerza, sustancia, entrenar como en el entrenamiento de un soldado, valiente, valor, virtuoso, guerra y digno”.

¿Escuchaste algo que indicara hablar en voz baja, con recato, callada, piadosa o casta? Esas palabras no están ahí. De hecho, esta misma palabra traducida virtud es la misma palabra que se usó para describir a los poderosos hombres de valor de David (lee 2 Samuel 23). Las palabras valor y virtuoso son traducciones de la misma palabra hebrea. ¡Así es como Dios describe a una esposa!

No es de extrañar que su precio esté muy por encima de los rubíes. No es de extrañar que ella sea el diamante.

Al estudiar el resto de Proverbios 31, veremos a Dios describiendo los detalles de cómo se ve a esta mujer virtuosa.

«Su esposo confía en ella de todo corazón, y por ella no carece de ganancias. Siempre lo trata bien, nunca mal, todos los días de su vida.» (versículos 11-12)  Puedes confiar en alguien que es digno y lleno de valor y fuerza. Son poderosos. Tienen gran poder. Son una fuerza de recursos y medios. Puedes confiar en alguien así.

«Sale en busca de lana y de lino, y afanosa los trabaja con sus manos. Se asemeja a una nave de mercaderes, que de muy lejos trae sus provisiones.» (versículos 13-14). Si ella se ajusta a esta definición, entonces ella es rica. Ella tiene los medios, los recursos y la capacidad para hacer estas cosas.

«Pondera el valor de un terreno, y lo compra, y con lo que gana planta un viñedo.» (versículo 16). Puede hacerlo porque es rica, exitosa y trabajadora.

Podemos saltar hasta el versículo 17: «Ciñe su cintura con firmeza y esfuerza sus brazos.» (RVA-2015). Me gusta lo que dice mi padre espiritual: “Ella no es una mujer gallina.” Ella es fuerte. No tiene miedo de nada.

A los hombres les gusta citar Job 38:3, «Cíñete, pues, los lomos como un hombre» (RVA-2015). Pero justo aquí en Proverbios 31:17, la mujer virtuosa ciñe sus lomos con fuerza y ​​esfuerza sus brazos.

«Está atenta a la buena marcha de su negocio» (versículo 18). Ella toma buenas decisiones y hace las cosas con excelencia.

«Sabe ayudar a los pobres, y tender la mano a los menesterosos.» (versículo 20). Ella tiene mucho dinero para dar a los pobres, y es generosa al hacerlo.

«Cuando nieva, no teme por su familia, pues todos ellos visten ropas dobles. Ella misma se hace tapices, y se viste de lino fino y de púrpura.» (versículos 21-22). En el contexto del día, este era un vestido exquisito y fino.

«Su esposo es bien conocido en la ciudad, y es parte del consejo local de ancianos.» (versículo 23). Esta es la descripción de la familia ideal como Dios pretendía. En esta era de las redes sociales, las personas a menudo señalan con el dedo y dicen: “Esas personas simplemente publican las cosas buenas. Nunca se sabe lo que sucede detrás de escena. Se hacen parecer a la familia perfecta”. Bueno, tal cosa existe y se describe en varios lugares de la Biblia. ¡Este es nuestro objetivo! Siempre debemos alcanzar el premio que se nos presenta en lugares como Proverbios 31, donde enumera cómo se supone que sea la familia.

«Las telas que hace, las vende…» (versículo 24). Ella sabe cómo obtener ganancias, «y provee a los comerciantes con cinturones. Se reviste de fuerza y de honra…» (versículos 24-25). Esa fuerza y ​​honor es inherente a la definición de la palabra virtuosa.

«Habla siempre con sabiduría, y su lengua se rige por la ley del amor.» (versículo 26). Hay un dicho que he escuchado y comunicado a menudo: “Una palabra de Dios puede cambiar tu vida para siempre”. La mujer virtuosa puede hablar una palabra de Dios en tu vida y cambiar las cosas.

«Considera la marcha de su casa y no come pan de ociosidad. Se levantan sus hijos y le llaman: “Bienaventurada”. Y su marido también la alaba.» (versículos 27-28, RVA-2015). Hombres, escuchen. ¡Su esposo la alaba! Él no se burla de ella. Él no la avergüenza. Él la anima y la alaba.

«Muchas mujeres han hecho el bien, pero tú las sobrepasas a todas.» (versículo 29). Estas son las hijas enseñadas por una mujer virtuosa. Se supone que las mujeres mayores deben enseñar a las más jóvenes según el libro de Tito (lee Tito 2:3-4). «La belleza es engañosa, y hueca la hermosura, pero la mujer que teme al Señor será alabada. ¡Reconózcase lo que ha hecho con sus manos! ¡Sea alabada ante todos por sus logros!» (versículos 30-31). La mujer virtuosa que teme al Señor no solo tendrá favor y belleza, sino que también será alabada.

Recuerda: uno de los atributos de un diamante que determina su valor es un corte multifacético. ¡No es casualidad que Proverbios 31 parezca estar describiendo algún tipo de superhéroe o Mujer Maravilla! Ella es multifacética y, por lo tanto, muy valiosa. Desde fabricar hasta los bienes raíces, desde la aptitud física y la ferocidad hasta el envío y las exportaciones, ¡parece que sus habilidades y unciones ordenadas por Dios no tienen fin!


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