¡Feliz Año Nuevo, Superkid!
¡El año pasado se acabó muy rápido! Siempre digo lo mismo, pero este año en particular me pareció que pasó volando. A lo mejor tú sientes lo mismo; sin embargo, espero que puedas mirar al pasado y decir que el 2017 fue un año lleno de cosas buenas de parte del Señor.
Recordar un año puede ser parecido a sentarse al lado de un árbol de navidad después de que los regalos ya se han abierto. Seguramente hay papel de regalo esparcido por todas partes, pero es fácil recogerlo y ponerlo en la basura. Lo que realmente es importante, son todas aquellas cosas maravillosas que tus seres queridos te obsequiaron—esas mismas cosas que eran un misterio solo hace algunas horas. Sentado en tu lugar podrías pensar: ¿Cómo voy a usar esta cosa? o, ¿Dónde voy a poner esto? Eso forma parte de la diversión del día de Navidad: la planeación y la emoción del futuro con tus regalos nuevos.
Superkid: quiero que utilices esta ilustración para recordar al comienzo de este nuevo año algunas verdades muy IMPORTANTES. Este mes deberíamos lidiar con la basura y las cosas negativas que estuvieron dando vueltas el año pasado. ¡Si no te encargas de la basura, dañará la experiencia y hará que sea difícil enfocarse en los regalos! Así que pensemos acerca del 2017. ¿Sucedieron en tu vida cosas difíciles y dolorosas, desilusiones, o aun pecados de los que no te arrepentiste? ¿Cómo te deshaces de esas cosas?
Primero ocupémonos del pecado. ¡Eso es fácil! De hecho, ¡Jesús ya se encargó de eso! Romanos 8:3, Nueva Traducción Viviente, nos dice: «La ley de Moisés no podía salvarnos, porque nuestra naturaleza pecaminosa es débil. Así que Dios hizo lo que la ley no podía hacer. Él envió a su propio Hijo en un cuerpo como el que nosotros los pecadores tenemos; y en ese cuerpo, mediante la entrega de su Hijo como sacrificio por nuestros pecados, Dios declaró el fin del dominio que el pecado tenía sobre nosotros». Todo lo que tenemos que hacer es confesar nuestro pecado y arrepentirnos.
Primera de Juan 1:7 nos dice además que la Sangre de Jesús, el Hijo de Dios, nos limpia de todos nuestros pecados. Los versículos 8-9 (NTV) nos dicen: «Si afirmamos que no tenemos pecado, lo único que hacemos es engañarnos a nosotros mismos y no vivimos en la verdad; pero si confesamos nuestros pecados a Dios, él es fiel y justo para perdonarnos nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad» ¡Todos necesitamos limpiarnos de la basura, no solamente cada año, sino TODOS LOS DIAS! Entonces, ora conmigo:
Padre, te confieso mis pecados. Si he pecado y no me di cuenta, por favor muéstramelo. Me arrepiento de todo pecado y te agradezco por enviar a Jesús a recibir el castigo por mí. Sé que Tú eres fiel para perdonarme. ¡Estoy LIMPIO, en el Nombre de Jesús! Amén.
Ahora Superkid, lidiemos con las heridas, las circunstancias difíciles y las desilusiones. La Palabra dice que Jesús NUNCA nos abandonará o nos dejará. ¡Por lo tanto, aun si todavía estás atravesando por un momento difícil, puedes confiar en Él para que solucione las cosas! Ten fe y confianza en Su Palabra. A continuación, te presento unas escrituras que te ayudarán en esta área:
Jesús dijo en Juan 14:18 (NTV): «No los abandonaré como a huérfanos; vendré a ustedes».
Hebreos 13:5-6 (NTV) dice: «Nunca te fallaré. Jamás te abandonaré» Así que podemos decir con toda confianza: «El Señor es quien me ayuda, por tanto, no temeré. ¿Qué me puede hacer un simple mortal?»
¡ÉL YA GANÓ NUESTRA PELEA!
«Les he escrito a ustedes, los que son jóvenes en la fe, porque son fuertes; la palabra de Dios vive en sus corazones, y han ganado la batalla contra el maligno» (1 Juan 2:14, NTV)
¡Pero gracias sean dadas a Dios, de que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo! (1 Corintios 15:57)
PODEMOS CONFIAR QUE ÉL SOLUCIONARÁ LAS COSAS POR NOSOTROS
«Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos» (Romanos 8:28, NTV)
ÉL ESTÁ DE NUESTRO LADO
¿Qué podemos decir acerca de cosas tan maravillosas como esas? Si Dios está a favor de nosotros, ¿quién podrá ponerse en nuestra contra? Si Dios no se guardó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿no nos dará también todo lo demás? ¿Quién se atreve a acusarnos a nosotros, a quienes Dios ha elegido para sí? Nadie, porque Dios mismo nos puso en la relación correcta con él. Entonces, ¿quién nos condenará? Nadie, porque Cristo Jesús murió por nosotros y resucitó por nosotros, y está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios, e intercede por nosotros. ¿Acaso hay algo que pueda separarnos del amor de Cristo? ¿Será que él ya no nos ama si tenemos problemas o aflicciones, si somos perseguidos o pasamos hambre o estamos en la miseria o en peligro o bajo amenaza de muerte?… Claro que no, a pesar de todas estas cosas, nuestra victoria es absoluta por medio de Cristo, quien nos amó… Ningún poder en las alturas ni en las profundidades, de hecho, nada en toda la creación podrá jamás separarnos del amor de Dios, que está revelado en Cristo Jesús nuestro Señor. (Romanos 8:31-35, 37,39, NTV)
Ahora, sabiendo que nada de lo que sucedió el año pasado puede detenerte para alcanzar todo lo que has sido llamado y destinado a hacer, Superkid, puedes salir y disfrutar de los buenos regalos que Jesús abrió para ti a lo largo del 2017. El próximo mes ¡profundizaremos en las cosas divertidas!
Hasta entonces, encuentra tiempo para abrirle tu corazón al Señor. Pídele que te muestre las cosas que necesitas saber. Me despido con un pensamiento para el próximo mes, el cual lo puedes leer en Hebreos 13:20-21: Y ahora, que el Dios de paz —quien levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas, y que ratificó un pacto eterno con su sangre—los capacite con todo lo que necesiten para hacer su voluntad. Que él produzca en ustedes, mediante el poder de Jesucristo, todo lo bueno que a él le agrada. ¡A él sea toda la gloria por siempre y para siempre! Amén.
¡ESE ERES TÚ SUPERKID! ¡TÚ ERES UN REGALO PARA ÉL Y DE PARTE DE ÉL!