Cada primavera, las madres son celebradas y reconocidas en todo el mundo. ¡El Señor está tan complacido, que quiere darnos una misión por un mes completo! Si no tienes una mamá, confía en Dios para que ayude a una abuela, una madrastra, una tía o una mentora a cumplir ese papel. Si ya lo hizo, ¡asegúrate de honrarla! Si solo tienes un papá, ¡Dios puede ungirlo para que ocupe el lugar de una madre, así como el de un padre! No importa cuál sea tu situación, confía en Dios y en Su Palabra.
La Palabra nos dice cómo admirar y respetar a nuestras madres (y padres). Ya que Jesús nos está dando la misión de bendecir y reconocer a nuestras madres, ¡asegurémonos de entender exactamente lo que Él quiere que hagamos!
La primera escritura sobre cómo tratar a tus padres es parte de los Diez Mandamientos. Éxodo 20:12, en la Nueva Traducion viviente, dice: «Honra a tu padre y a tu madre. Entonces tendrás una vida larga y plena en la tierra que el Señor tu Dios te da.» Luego, Efesios 6:1-3 (Biblia Viviente), nos lo detalla: «Hijos, obedezcan a sus padres; esto es hacer lo correcto porque Dios los ha puesto como autoridad sobre ustedes. Honra a tu padre y a tu madre. Este es el primer mandamiento que contiene una promesa. Y esta es esa promesa: «si honras a tu padre y madre, disfrutarás de una vida larga y llena de bendición»».
Tomemos esta tarea un detalle a la vez.
«Hijos, obedezcan a sus padres; esto es hacer lo correcto porque Dios los ha puesto como autoridad sobre ustedes.»
Puede ser un gran desafío aceptar que Dios ha puesto a las personas en autoridad sobre nosotros. Pero, hacer las cosas a nuestra manera solo nos hace la vida más difícil. Proverbios 13:15 (Biblia Wycliffe) dice: «La buena enseñanza traerá favor; un pozo está en camino de aquellos que la desprecian.» Despreciar es “menospreciar, considerar algo sin importancia o prestarle poca atención”. Cuando menosprecias o no prestas atención a lo que dice tu mamá, estás despreciando su sabiduría. Mi definición de pozo es “un agujero profundo del que no puedes salir sin ayuda”. La desobediencia conduce a una vida dura y difícil.
«Honra a tu padre y a tu madre.»
Cuando eliges honrar, has elegido obedecer. ¡Es la elección que exige tu obediencia! La palabra honor significa “tener un gran respeto por algo, mostrar apreciación, reverenciar (mirar con asombro)”. Honrar a tu madre incluye escucharla y considerar sus palabras como valiosas e importantes. Esta actitud del corazón te alentará a obedecer rápida y fácilmente.
«Este es el primer mandamiento que contiene una promesa. Y esta es esa promesa: «si honras a tu padre y madre, disfrutarás de una vida larga y llena de bendición»»
¡Dios desea que vivas una vida larga y plena al punto que nos dio esta tarea con una promesa de recompensa! De hecho, ¡es el único de los Diez Mandamientos que viene con una promesa adjunta! Cuando la Biblia habla de que Dios bendice a las personas, habla de gran alegría, riqueza, tierras y paz. ¡Esta es tu recompensa por honrar a tu madre!
¡Dios tiene tal deseo de bendecirnos que envió a SU Hijo perfecto, Jesús, para ayudarnos! Jesús sabe lo que es obedecer cuando no quieres hacer algo. Él honró y obedeció a Su Padre cuando no quería ir a la Cruz. Entonces, Él puede ayudarnos a honrar y obedecer a nuestras madres (y padres), incluso cuando sea difícil.
A veces, las mamás se estresan o se frustran. Pueden estar ocupadas y no prestarte suficiente atención. ¿Qué deberías hacer? Habla con Jesús al respecto. Él te ayudará a perdonar y ver las cosas a través de Sus ojos. Lo mejor de todo es que Él te ayudará a olvidarte de ti mismo y te mostrará cómo puedes ayudar a tu mamá. Tú y Jesús pueden marcar la diferencia en su día, como ella lo hace en el tuyo todos los días. ¡Las mamás tienen una misión del Señor para ayudarte a mantenerte en el camino correcto y bendecirte!
Tu misión este mes, Superkid, contribuirá a que tengas una actitud de honra hacia tu mamá durante toda la vida, y eso es preciado para el Señor. Estás haciendo esto por Jesús porque Él aprecia la manera en que ella te está criando, ayudándote a alcanzar tu destino como Superkid. ¡Entonces, lava esos platos, haz esas camas y ama a esas mamás! Y mientras lo haces, agrega algunos abrazos y tiempo de calidad, y tal vez incluso un masaje en los pies. ¡A ellas les encanta eso!
Le envío mi amor a todos MIS hijos,
La Comandante/Mamá Kellie
P.D. Me gustaría honrar a MI mamá, Gloria Copeland. Ella es un gran regalo para mí y para todo el pueblo de Dios. Ella me enseñó acerca de Jesús y Su Palabra antes de enseñarle al mundo. Gracias mamá por mostrarme el amor de Jesús y Su fidelidad. ¡Eres una gran publicidad para el fruto del espíritu y el fruto de una vida vivida por Jesús!