Superkids, he estado en otra búsqueda de tesoros maravillosa… excavando en búsqueda de diamantes en el cráter de los diamantes en Murfreesboro, Arkansas.Te dejan excavar para buscar diamantes, y puedes quedarte con lo que encuentras.

El diamante más grande que alguna vez han encontrado lo llamaron Tío Sam y pesó 40,23 quilates. ¡Es grandísimo! En 2016, encontraron 501 diamantes de más de un quilate. ¡El día siguiente de que nosotros fuimos, un niño encontró uno al que llamó el Diamante Superman!

¿Por qué no lo encontré yo?, pensé. Sin embargo, creo que la respuesta es muy obvia. ¡No busqué en el lugar correcto! Seguro que busqué, pero estaba al otro extremo del lugar en que encontraron a Superman. Finalmente me di por vencida y me fui al Centro de Visitantes para esperar a que mis amigos terminaran. Estaba buscando un mapa que mostrara dónde habían encontrado diamantes a lo largo de los años, cuando hice un descubrimiento muy importante—la mayoría de los diamantes han sido encontrados en un área específica. Y el Superman lo encontraron en la misma zona que los otros grandes. ¡Cómo deseé haberle prestado atención a ese mapa ANTES de ir a excavar buscando diamantes!

Después, pensé en ti y en la búsqueda de tesoros que empezamos el mes pasado (revista LVVC de mayo de 2017), cuando hablamos de buscar la sabiduría usando todas las herramientas que Dios nos ha dado. ¿Recuerdas cuáles son? Escuchar, escoger atesorar los mandamientos, poner atención a lo que te dicen, concentrarte, clamar, pedir, buscar—esas son las herramientas de Dios para ti para que adquieras sabiduría. Yo ciertamente no usé todas las herramientas disponibles para encontrar un diamante, pero encontré algo de SABIDURÍA para compartir contigo, junto con una foto mía maravillosa excavando en la tierra. (¡Me parece muy graciosa!)

El mes pasado leímos Proverbios 1:5-6, así que empecemos hoy en el versículo 7 y excavemos un poco más en la Palabra de Dios. «El temor del Señor es la base del verdadero conocimiento, pero los necios desprecian la sabiduría y la disciplina» (Nueva Traducción Viviente).

Yo ignoré la sabiduría que el Centro de Visitantes tenía para ofrecer: mapas, explicaciones, aun un video que explicaba cómo encontrar diamantes. Yo estaba demasiado emocionada por buscar tesoros y divertirme. Así que decidí no detenerme y recibir algo de sabiduría; sin embargo, hubiera sido muy divertido encontrar un diamante. Aquellos que no “aprecian y respetan” (o temen) la VERDADERA sabiduría, conocimiento y disciplina, la Biblia los llama necios.

Buscando el tesoro

Una herramienta que desprecié y omití fue un colador para tamizar. Puedes poner trozos de tierra en él y lavar el exceso bajo el agua. Eso, a menudo, hace que sea más fácil detectar los diamantes. Pero yo tenía demasiado frío como para mojarme al usarlo, aunque realmente necesitaba un colador para extraer los diamantes.

El mes pasado vimos que Dios quiere que lo busquemos a Él y a nuestros padres para encontrar sabiduría.

El Espíritu Santo y Su sabiduría son como el colador en nuestra vida, tamizando lo que no necesitamos. Este mes te pediré que hagas unas tareas. ¡NO entres en pánico! No es tan difícil. Vamos a orar y a pedirle al Señor que nos muestre en qué nos hemos equivocado, igual que cuando Él me mostró ese mapa en el campo de diamantes. Entonces Superkid, quiero que hagas una lista de lo que Él te muestre. Trabaja en ella como familia: Mamá y papá también pueden ayudarte a buscar en algunas áreas que pasen inadvertidas. ¿Cuáles son las cosas que te distraen? ¿Dónde estás poniendo toda tu atención? ¿Son los problemas o la ansiedad lo que te impide buscar la sabiduría? Dios lo sabe y te lo dirá. Ora esta oración con tu familia:

Padre, gracias por la sabiduría que me ofreces en Tu Palabra hoy (Santiago 1:5). La recibo en el Nombre de Jesús. Por favor, muéstrame dónde le he dado la espalda a la sabiduría. Muéstrame en qué me he focalizado en vez de hacerlo en el tesoro que tienes para mí. Recibo tu corrección porque sé que me amas. En el Nombre de Jesús, Amén.

Superkids, yo no encontré el diamante que buscaba, pero ¡creo que encontré un buen tesoro para ti! Y la próxima vez que vaya a buscar diamantes, usaré toda la sabiduría y conocimiento adquiridos, para al menos buscar en el lugar correcto y encontrar ese tesoro. ¡Así que feliz cacería de sabiduría y conocimiento, Superkid! Hasta el próximo mes, cuando hablaremos de los amigos en la búsqueda de tesoros.