Mis Queridos Kenneth y Gloria,

Mis mentores, mis colegas, mis amigos.

He sido tan bendecida como testigo de la mayor parte de sus 50 años de ministerio. En esta carta no se pueden expresar los detalles más pequeños que he visto. Sin embargo, estos son solo algunos de los momentos memorables que recuerdo…

Abril de 1967, Tulsa, Oklahoma: Reunión en el edificio de Kenneth E. Hagin 

Palabra profética de la hermana Clara Grace: “¿Por qué están aquí esta noche? Están aquí, porque Dios está levantado Su ejército para el final de los tiempos, y ustedes son unos de los jefes del clan”.

Hoy en día, muchísimas personas han sido testigos de cómo esta profecía se ha cumplido en sus vidas a medida que Ustedes lo han seguido a Él.

Probablemente en 1969 

Yo era miembro del equipo de los Ministerios Kenneth Hagin. Los 13 del equipo estábamos trabajando con el aparato que empacaba La Palabra de Fe según el código postal, y preparaba los paquetes para enviarlos por correo. Fred Hodges nos dijo: “Hay un hombre que está yendo por todas partes, predicando casi palabra por palabra los sermones del Hermano Hagin, usando los mismos títulos”.  Nosotros expresamos nuestra desaprobación en voz alta, y prometimos contárselo al hermano Hagin cuando regresara de su viaje ministerial. Nos pusimos nuestras túnicas de fariseos y lo hicimos. Sin embargo, cuando el hermano Hagin escuchó nuestro reporte, levantó sus manos al cielo y empezó a alabar al Señor: “Oh, Señor, gracias. Gracias porque alguien más está predicando este mensaje además de mí. Ya sabes con qué frecuencia he orado pidiéndote para que alguien más, para que otras personas prediquen estas verdades para bendecir a la gente y traer gloria a Tu Nombre”.

Rápidamente cambiamos de sintonía y empezamos a alabar al Señor con él.

Reuniones a través de los años

Reuniones de enseñanza. Reuniones del Espíritu Santo. Tantos de ustedes reunidos: El hermano Hagin, el hermano [Oral] Roberts, el hermano [John] Osteen, el hermano Norvel Hayes, T.L. Osborn, Dr. Frederick K.C. Price, Papá y Mamá J.R. Goodwin, Phil Halverson, las hermanas Wilkerson y Clara Grace. Los vimos a ustedes danzar en el Espíritu, sin caretas, como David danzaba. Las noticias llegaron a la portada del diario Tulsa World (El Mundo de Tulsa).

Escuela de Sanidad

¡Dios tocó a una pequeña niña, aparentemente tímida, y le dijo que comenzara con la Escuela de Sanidad! ¡Y qué resultados! ¡Cuántos miles de miles han sido bendecidos por sus enseñanzas y su ministerio de sanidad!

Televisión

Recuerdo cuando el Señor les dijo que aparecieran en televisión todos los días. Recuerdo que primero lo compartiste con la iglesia de Ed Dufresne, en Tulsa. ¡Una noche del Espíritu Santo! También recuerdo cuando caminábamos al hotel con ustedes en Kiev, Ucrania. Miramos al otro lado de la calle a través de la puerta abierta de un bar, donde se podía ver una pantalla gigante de televisión, y allí estaba Kenneth Copeland predicando en el idioma que ellos entendían.

¡Tantas cosas! Y ni siquiera he empezado a mencionar cuánto me han bendecido personalmente. Su enseñanza de la fe por precepto y ejemplo, las oportunidades que me dieron, aviones, en fin, todo esto y muchísimo más…

En el amor del Señor,

Billye